Ayer comenzaba en la Ciudad del Vaticano la campaña de vacunación contra el Covid-19. Hoy, desde la Oficina de Prensa de la Santa Sede, confirmaban que la primera dosis ya “ha sido suministrada al Papa Francisco y al Papa Emérito”. Una vacunación que el Santo Padre definía en días pasados como “una acción ética, porque te juegas la salud, te juegas la vida, pero también te juegas la vida de los demás”.
Al igual que en el resto de países, la campaña de suministro de la vacuna ha comenzado con las categorías de mayor riesgo y los ancianos. La Dirección de Salud e Higiene de la Gobernación del Vaticano, contaba, ha principios de año, cómo se planificaría esta medida: “Se dará prioridad al personal de salud y seguridad pública, a los ancianos y al personal que esté en contacto más frecuente con el público”. Las dosis están siendo administradas, por el personal médico y de enfermería, en el atrio del Aula Pablo VI.