En este día de Nochebuena el Niño de la Virgen del Rocío ha amanecido vestido con el traje rojo que, por encargo de la Hermandad Matriz, realizó en 2009 Mamé de la Vega. Compañero a este traje, la Virgen luce el manto y sobremangas del mismo color.
La Patrona de Almonte luce un nuevo rostrillo, regalado en febrero por la familia Muñoz Merino, de Sanlúcar de Barrameda. Ha sido realizado por ellos mismo, en el taller de Orfebería Sanlúcar. Es de estilo barroco, cincelado en plata sobredorada, con engaste de pedrería fina, flor de romero esmaltada al fuego en la parte baja, ramilletes de azucenas en sus laterales, en plata, y la paloma del Espíritu Santo que sostiene una piedra en forma de gota, en su pico, en la cartela central. Todo montado sobre fondo de tisú de plata.
Las flores de la Virgen son las de talco, que llevase en su salida extraordinaria de 2013, con motivo del Bicentenario del Rocío Chico. Entre sus broches y joyas, destacan los corazones de plata, que a veces ha llevado de Pastora, y estrena un camafeo realizado a mano y decorado con perlas naturales y piedras preciosas, en homenaje a la música dedicada a la Virgen del Rocío, simbolizado en un ángel que toca un arpa.